Perros policias

Había una vez un perro que se llamaba Doy, que siempre quiso ser policía. Un día llegó el jefe de la comisaría y le ofreció un puesto de policía, porque habían echado a un chihuahua, que había robado un diamante... Bueno, volviendo a lo de antes: Entonces Doy saltaba de alegría, obviamente le dijo que....no.
¡Es broma!!! le dijo que sí. Empezó a trabajar al día siguiente.
Al llegar a la comisaria le atendió una perra de color amarillento que le dio su traje y los complementos.
Después de un rato, sonó la alarma de socorro y Doy salió como un rayo al coche de policías.
Cuando llegó a ese lugar, estaba el chihuahua que robó el diamante. Doy le dijo que pusiera la manos en alto y que entrara al coche, misteriosamente le obedeció inmediatamente y se metió dentro.
Cuando llegaron a la comisaría pusieron al chihuahua
en la sala de interrogatorios. Doy fue el primero en entrar, y le dijo:

_Oye, yo te conozco de algo?_ preguntó.
_Más de lo que crees._respondió el chihuahua con voz tenebrosa.
…
_Ya sé, tú mataste a mi hermano!!
_No! Yo soy tu hermano._respondió el chihuahua.

Entonces el chihuahua empezó a llorar.
Doy le ofreció un puesto en la comisaría. Desde entonces el chihuahua se pasó al mando de los buenos.

Y vivieron muy felices y comieron comida para perros.


fin

Tomás